Era sencillamente perfecto, y disfrutaba a diario del regalo que cualquiera envidiaría tener: hacer realidad lo imposible… hasta que el ser humano desobedeció. ¿Como pudo hacerlo? ¿Como desobedecer la única orden que había recibido para mantenerse en ese mundo perfecto? Era solo UNA orden. Cuando Adán fallo, no solo perdió su pureza, su salud y su prosperidad, sino también perdió la capacidad cerebral de lograr lo imposible; en el mismo instante que Eva desobedeció la única orden de Dios para la humanidad, le puso profundos límites al ser humano; el pecado limito la vida, capacidad cerebral, poder, comunión con el Creador y capacidad de crear que el ser humano tenía en el paraíso, y las cambio por una vida llena de cosas imposibles de realizar.

El ser humano había tirado a la basura el regalo más extraordinario visto jamás: el poder de convertir lo imposible en posible. Desde ese día el ser humano empezó a vivir una vida con muchos “imposibles”. Pero la Fe es la clave para cambiar eso.

La Fe nos permite dejar de ver todo como “imposible”, y nos da las estrategias para transformarlo todo en “posible”. La Fe restaura tres cosas: nuestra capacidad cerebral, nuestro nivel espiritual y nuestro poder Creativo perdido cuando desobedecimos a Dios en el paraíso.

1. La Fe restaura nuestra capacidad cerebral

Marcos 9:23 “Jesús declaro: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.”

La Fe es un expansor cerebral. La Fe es un regalo de Dios que recibimos cuando Jesús nos devolvió lo que perdimos en el paraíso debido a nuestra desobediencia, la Fe no se trata de creer en algo ciegamente, sino que se trata de la oportunidad de liberar el poder de Dios en el siglo 21. Ahora por medio de la Fe, Dios nos permite accesar al nivel de la Creatividad y lo Sobrenatural, ese nivel donde puedes crear todo de la “nada” ese nivel donde no existen límites.

Dios nos dotó de un cerebro increíble, pero el pecado y la incredulidad deterioró nuestra capacidad cerebral, y ahora los “genios” solo usan el 7% de esa capacidad. El mundo espiritual (donde Dios habita) está fuera del alcance de nuestra mente actual. Jesús pagó en la cruz la restauración cerebral del ser humano, ahora cuando hablamos con Dios y evitamos el pecado nuestro cerebro es restaurado al 100%, dándonos acceso al nivel espiritual donde esta Dios, el nivel donde todo es posible.

Comprende algo poderoso: la fuente de todo conocimiento, sabiduría y ciencia es Dios, por lo tanto, solo ingresando a Su presencia por medio de la Fe, adquiriremos la capacidad cerebral completa con la que Dios nos creó en el paraíso.

2. La Fe nos permite conocer a Dios

Hebreos 11:6 – “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que quiera conocer a Dios, crea en Él, y que es galardonador de los que le buscan.”

Por medio de la Fe ingresamos a la Presencia de Dios. Dios habita en el mundo espiritual, y ese mundo está regido por leyes distintas a las nuestras, en el mundo espiritual el poder máximo es la Fe. Todo se crea o destruye por medio exclusivamente de la Fe. Dios habla Fe, se mueve en Fe, crea por medio de la Fe y piensa basado en Fe, es por eso que sin Fe es imposible agradarle, y mucho menos conocerle. Solo una mente “inyectada” de Fe tendrá el privilegio de escuchar a Dios y conocerle íntimamente.

La Fe es el poder que nos capacita para avanzar al nivel espiritual, la incredulidad destruye nuestros avances espirituales al 100%, impidiendo que conozcamos al Creador y seamos saciados de Su Amor, sabiduría y poder.

3. La Fe permite crear un nuevo planeta tierra.

Hebreos 11:3 – “Por medio de la Fe comprendemos como Dios creo el universo, de modo que lo que se ve hoy, fue hecho de lo que no se veía.”

Entre más se aleje el ser humano de su Creador, más imposible será vivir. Es por eso que la tecnología, la ciencia, la política y la religión pueden poner su grano de arena, para lograr mejorar nuestra vida en el planeta tierra; pero ninguna logra lo imposible. Es por eso que podemos sanar un cáncer usando miles de químicos y mucho tiempo en tratamientos; pero aún no podemos sanar sin necesidad de usar medicina y costoso equipo médico, porque esto último solo es accesible a través de la FE. Por eso podemos detener a delincuentes con sofisticados aparatos de GPS y armas impresionantes, pero el cambiar el corazón del ser humano para que ya no haya violencia en el mundo, es un nivel accesible únicamente por la FE. Por eso podemos pronosticar con exactitud desastres naturales y prepararnos tecnológicamente para resistirlos, pero evitar que estos ocurran es un nivel exclusivo de la FE.

Jesús no solamente nos devolvió el acceso al Cielo, a la felicidad y a la Vida eterna, sino también el acceso a hacer realidad las cosas imposibles; desde que Él pago el precio de los pecados, todo volvió a ser posible para el ser humano, todo dependería de su capacidad personal de Creer. Lo imposible seria nuevamente posible por medio de la FE.

La ciencia, la religión, la inteligencia humana, la tecnología, los gobiernos… están delimitados por lo que es posible; el nivel de hacer cosas imposibles es exclusivo de la FE.

Resucitar muertos, cambiar el clima, detener tsunamis y terremotos, eliminar el odio y alcanzar la Vida eterna, son ejemplos de la consecuencia de haber accedido al nivel de lo imposible por medio de la FE. Mientras sigamos desobedeciendo a Dios y confiando en la ciencia, religión, gobernantes, la “suerte” o en nosotros mismos, nos deberemos conformar con el nivel de lograr únicamente lo posible, porque lo imposible solo lo lograremos por medio de la FE. La Fe tiene el poder de crear un nuevo planeta tierra.

La clave secreta de la restauración humana es la fórmula: OBEDIENCIA + FE

Adán y Eva perdieron el acceso a una vida SIN imposibles, por desobedecer una sola Orden Divina. HOY tú puedes recuperar ese acceso gracias a Jesús, obedeciendo una única orden Divina: aléjate de la incredulidad. Por eso hoy te digo a ti viéndote directamente a los ojos y sin el menor temor: si te atreves a creer que es posible, tendrás el privilegio de verlo hecho realidad.

Escrito por: PASTOR ALEJANDRO RIVAS